Desde ayer y durante al menos diez meses vecinos sufrirán otro tipo de contaminación por la construcción del nuevo nivel del Periférico Norte.
CIUDAD DE MÉXICO, 11 de enero.- Ruido, contaminación, vibraciones, basura, derribo de árboles e invasión de zonas verdes son tan sólo algunas de las afectaciones que generará la construcción del segundo piso vial en el Periférico Norte y que afectarán a vecinos de colonias aledañas al tramo de Cuatro Caminos a Conscripto en donde ayer comenzaron las obras.
El principal problema será el ruido, ante el arribo de maquinaria, el traslado de materiales y las excavaciones que se realicen de las 11 de la noche a las cinco de la mañana, horario establecido para la realización de maniobras.
En ese lapso, las autoridades locales estiman que podrían incrementarse los niveles de ruido en la vialidad que de por sí, es calificada como ruidosa al alcanzar hasta 86 decibeles diariamente.
Conforme a la Norma Ambiental para el DF NADF-005- AMBT-2006, las actividades que se realizan de las 8 de la noche a las 6 de la mañana en la ciudad no pueden rebasar la emisión de 62 decibeles que equivalen al ruido que generan plantas de luz, bares, discotecas o troqueladoras
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