Ciudad de México.- A pesar de que un total de 138 ciudades, de 43 países firmaron el Pacto de la Ciudad de México, con el que se comprometen a reducir sus emisiones contaminantes, el jefe de Gobierno del DF, Marcelo Ebrard, aclaró que no habrá sanciones para los gobiernos locales que incumplan sus metas y compromisos.
Si bien, dijo, la firma de este pacto permitirá a las ciudades poner un ejemplo a nivel mundial, de lo que debe hacerse para luchar contra el cambio climático, al final, cada ciudad se impuso su propia meta de disminución de contaminantes y en caso de incumplirla no habrá ni multas ni sanciones.
Aunque en un principio, el jefe de Gobierno había señalado que la meta era que todas las ciudades firmantes se comprometieran a reducir sus emisiones de gases de efecto invernadero en un 18 por ciento, finalmente, se dejó en libertad a cada Gobierno de definir el porcentaje de su reducción.
Lo más importante del Pacto de la Ciudad de México, destacó Ebrard Casaubón, es que "todas las ciudades se comprometieron a reducir sus emisiones para que no continúe la tendencia de calentamiento global que pone en riesgo la sobrevivencia de las propias ciudades".
Consideró que es un avance relevante, ya que se estableció un mecanismo de control y verificación de reducción de emisiones "y que por primera vez nos permite tener una vía de acción con resultados específicos en vez de estarnos lamentando cada vez que terminan las cumbres que no se logró nada, aquí sí se logró, se estableció y se pactó. Entonces, estamos muy optimistas".
El mandatario local destacó que tan sólo la Ciudad de México, gracias a un esfuerzo muy grande, ha reducido en cuatro por ciento sus emisiones de gases contaminantes a la atmósfera, algo que no han hecho Estados Unidos ni otros países.
Y es que, dijo, el DF ha entendido que es una ciudad altamente vulnerable a los efectos del cambio climático, aunque en general, la supervivencia de las ciudades depende, en gran medida, de las acciones que tomen sus gobiernos locales para frenar el calentamiento global.
Destacó que con el Pacto de la Ciudad de México, que firmaron los gobiernos locales de 138 ciudades, ahora tienen la autoridad moral para exigir a los jefes de estado, acciones más contundentes, pues las que han tomado a la fecha, han sido lentas y tibias.
Al participar en el Seminario Internacional de la Red de Autoridades para la Gestión Ambiental en Ciudades de América Latina, indicó que es urgente impedir que la temperatura se eleve dos grados centígrados en los próximos años, ya que los efectos serían devastadores para muchas ciudades.
El mandatario local celebró que una gran cantidad de ciudades de América Latina hayan firmado el Pacto, ya que así se demuestra que en la región hay un compromiso muy serio y que "están asumiendo responsablemente sus metas de reducción de emisiones".
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